Minería urbana
MINERÍA URBANA
¿QUÉ ES?
La Minería Urbana es el reciclaje de aparatos eléctricos y electrónicos (AEE), focalizando en los componentes de su interior. Esto se debe a que están fabricados con materias primas que son finitas y, por lo tanto, cada vez son más difíciles de encontrar en la naturaleza.
Según eso, nuestros smartphones, ordenadores o electrodomésticos son una fuente de componentes con mucho valor. De hecho, algunos de los dispositivos que usamos en nuestra rutina diaria pueden contener hasta 60 elementos de la tabla periódica como el cobre, el hierro, e incluso el oro y la plata.
Dicho en nuestras propias palabras:
“Nuestro sentir es que estamos habitando y construyendo una vida en un planeta (un lugar para remar) y que debemos cuidar y estar en capacidad de encontrar un balance para que nuestra vida o nuestra remada sea constante y equilibrada. Que debemos vivir en un constante aprendizaje en el que el pasado nos dé el contexto para que en el presente podamos corregir los errores y perfeccionar los aciertos enmarcados en un aprendizaje perpetuo para construir un mejor futuro.
Y todo esto se resume en la noción de MINERÍA URBANA. Por décadas, hemos basado nuestro status quo a partir de la explotación de recursos naturales. Últimamente hemos idealizado la noción de productos verdes, radicalizando la prohibición de muchos materiales a cambio de la extensiva explotación de recursos naturales (madera entre otros). La MINERÍA URBANA nos permite precisamente apelar a ese balance. Nos permite tomar el pasado para actuar en el presente y corregir el rumbo hacia el futuro. La MINERÍA URBANA apela de manera precisa al concepto de principio y fin en una constante evolución y crecimiento a partir del aprendizaje perpetuo y la eterna evolución”.
BENEFICIOS
El principal beneficio de la Minería Urbana tiene una relación directa con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues la recuperación de materiales para darles una nueva vida contribuye para garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles. Además, evita el desabastecimiento de determinadas materias primas en el mundo. Por todas estas razones, la Minería Urbana es una solución cada vez más presente para avanzar hacia un modelo de Economía Circular.
La Unión Internacional de Telecomunicaciones, una agencia de Naciones Unidas, estima que alrededor de 45 millones de toneladas de residuos de aparatos electrónicos se generaron en 2016. Se espera que esa cifra alcance las 50 millones de toneladas para 2021.
Tan solo en 2016, 435.000 toneladas de celulares fueron desechados, pese a que contenían materias primas calculadas en hasta US$11.000 millones.
Gracias a la Minería Urbana, muchas toneladas de oro, plata y otros metales y elementos son usados actualmente en el mundo cada año para fabricar PCs, smartphones, ordenadores, tabletas y otros dispositivos electrónicos y eléctricos.
Comparada con la Minería Tradicional, la Minería Urbana puede llegar a generar más empleos y riquezas. Mientras una mina de oro puede generar 5 ó 6 gramos del metal por tonelada de materia prima, esa cifra aumenta hasta los 350 gramos por tonelada cuando la fuente es un aparato electrónico y/o eléctrico desechado.
“Velar porque los residuos de aparatos eléctricos y/o electrónicos no lleguen a un relleno sanitario o lleguen a sitios que puedan generar un impacto negativo sobre los recursos naturales como el agua, el suelo o el aire, es decir, siempre buscando la mejor alternativa de gestión para cada componente y/o fracción que resulte de los RAEE y que en lo posible sea reincorporado a la cadena productiva como una nueva materia prima. En lo social, debe traducirse en sensibilizar a los consumidores para que asuman la responsabilidad de los residuos que generan y a su vez de entregarlo a empresas como nosotros, que a lo largo de su trayectoria hemos desarrollado experticia en una correcta gestión de estos residuos”.
Dicho en nuestras propias palabras:
Existe una responsabilidad en la Minería Urbana
“Por otra parte, nuestro mayor enfoque se encuentra en generar una conciencia colectiva sobre la escala de reciclaje que cada uno de nosotros debe tener adherida en su vida, y es la siguiente: rehusó, reacondicionó y por último recicló (con el objetivo de generar la menor cantidad de basura)”.
Asesoramos y
CAPACITAMOS
a nuestros clientes, para implementar mejores practicas ambientales
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